Del sueño a la pesadilla

 Editorial 

El día de ayer se disputo el último partido que le quedaba a la selección colombiana de futbol para clasificar al mundial.

Lastimosamente el esfuerzo no les alcanzo, tras 2 técnicos sin direcciones claras, 7 partidos sin marcar gol y varias discusiones entre los jugadores del equipo, quedaban pocas posibilidades para una victoria.

El haber perdido la oportunidad de ir a un mundial no solo baja una vez más el nivel del futbol colombiano, sino que además termina con las esperanzas de muchos comerciantes que esperaban con ansias estas fechas para poder mejorar su situación económica.

En Colombia, el mundial es de gran impacto para la economía, según la Federación Nacional de Comerciantes, Fenalco, en los últimos 2 mundiales en los que participo la selección colombiana de futbol, el celebrado en Brasil 2014 y en Rusia 2018, la economía tuvo una mejoría entre el 30% y el 40% en comparación con las cifras del mismo periodo de tiempo en años sin el fenómeno del futbol.

Por esta razón, los dueños de bares, discotecas, vendedores de textiles, adornos y hasta dueños de papelerías esperaban la clasificación, ya que el no entrar, no solo reducen sus ganancias, sino que además aumentan sus pérdidas ya que son muchos los que ya habían invertido en la preparación para esta fecha.

Como es el caso de dueños de bares que invirtieron en la adecuación y ampliamiento de sus negocios con el fin de recibir a más personas debido a la demanda que se vivió en mundiales pasados. Adicionalmente las personas que se mueven dentro de este tipo de comercio, según Adriana Plata, presidenta de la Asociación de Bares de Colombia, Asobares, esperaban una mejora de sus ventas entre un 10 % y un 20 %

Por otro lado, Bryan Pardo, presidente de la Asociación Colombiana de la Industria Gastronómica, ACODRES, afirmo durante una entrevista, hace un par de semanas, que “de no Clasificar al mundial, el sector se estaría viendo afectado en unos $350 mil millones en esas ventas que no va poder generar, debido a que no habría el mismo nivel de convocatoria y de afluencia”.  

En conclusión, la selección no solo se quedó con los crespos hechos y se los dejo hechos a los fanáticos y seguidores de este deporte, sino que además defraudo a cientos de comerciantes que contaban con esta clasificación para mejorar su estabilidad económica, con ese impulso que tanto necesitamos ahora.

Ahora solo nos queda esperar mejores resultados en las elecciones presidenciales, confiar en que los congresistas electos el pasado 13 de marzo cumplan con sus promesas y apoyen este sector para que la economía no dependa de la suerte y el desempeño de unos cuantos.